Durante más de diez años he construido mi vida alrededor del músculo y el fitness. Me he acostado pronto, he dicho que no al alcohol - y ocasionalmente a las chicas-, he viajado mucho para llegar a los lugares adecuados, y me he obligado a atiborrarme de comida o a matarme de hambre, según los objetivos. Me lo tomé enserio.
Pero no era así y ahora lo veo claro. Porque al mirarme un día al espejo y decirme "¿Así es como quieres verte?" , descubrí que ese cuerpo no reflejaba una década de disciplina. Al menos , no me lo parecía a mi. Y luego pensé . "¿Esto es lo que hago de press banca?" He de admitir que no tenía el nivel de fuerza suficiente para justificar todo el hierro que había levantado.
Cuando quieres algo, ya sea un buen cuerpo o una vida mejor, es todo lo que hay en tu persona. Se habla mucho de equilibrio para lograr lo que deseas. A la mierda con ello. Hasta que no consigas tu objetivo principal, no vas a estar contento con algo menos.
Si hubiera querido estar tan fuerte y en forma como pensé que lo deseaba, habría hecho más sacrificios, habría conseguido más con menos.
De momento, olvídate de dietas, suplementos y genética. Tu percibida falta de éxito en lo que quieres no es lo que te está retrasando, lo hace tu falta de corazón.
Cuando quieres y estás deseando trabajar por ello, puedes descansar fácilmente. Llegarás allí. Tu deseo te conducirá a donde están los recursos adecuados. Y no te sorprendas si a lo largo del camino encuentras personas y lugares que cubren tus otras necesidades. Fija un plan para lograr lo que deseas de la vida y construirás una vida para obtener lo que buscas.
Escrito por Sean Hyson